Afecta alrededor del 1% de la población. Puede presentarse en formas leves o más graves.
Aproximadamente un 85% de los casos se consideran leve (entre 50 y 70 de cociente intelectual). Estos niños son capaces de permanecer en el sistema educativo, adquirir algunas destrezas de independencia, formarse e incluso tener actividad profesional.
En los casos con discapacidad intelectual moderada, el cociente intelectual se sitúa entre 35 y 50. Suelen necesitar mucha atención y dedicación, pero pueden tener cierto grado de autonomía.
La discapacidad intelectual grave se da en los casos con un cociente intelectual entre 20 y 35. Estas personas tienen las habilidades reducidas, poca o nula compresión lectora y numérica. Necesitan una supervisión continua.